El matrimonio y el juego del bote

Un matrimonio, la rutina y como un juego puede hacer que se vuelva a prender la llama. Nada cuando se juega en equipo.

Decía cervantes que de casado a cansado solo había una letra de diferencia-

Lo normal es que la rutina, y los años den paso a una monotonía tan constante que puede considerarse vulgar, el matrimonio puede ser una institución venerable pero también puede convertirse en una institución tan diplomática y tan políticamente correcta que aburra, podemos añadir, niños, preocupaciones conjuntas, individuales, trabajos, estrés… en definitiva… el día a día…, los humanos somos así, cualquier excusa es buena con...

El Castillo de Alou (Final)

Desenlace de de los hechos que acontecieron en el castillo de Alou.

Pasaron los días y llegó inevitable el momento de la gran orgia de la marquesa, Juliette y yo habíamos utilizado una cuartada para no asistir, no era intención mía ni de ella la de compartirnos con terceras personas.

Ese día decidir no salir de mi alcoba para no levantar sospechas innecesarias, Juliette hizo lo propio se quedó en la habitación que compartía con las demás sirvientas, aparentando estar enferma, no nos veríamos hasta haber pasado la fiesta, alto precio para mis sentimientos anhela...

El Castillo de Alou (5)

En esta ocasion el escribano Janot nos explica sus antecedentes amorosos. Monjes, Huerfana, y despertar sexual.

EL CASTILLO DE ALOU

QUINTA PARTE

Los siguientes días a nuestro encuentro en la antigua capilla fueron frenéticamente sexuales y apasionados, nos buscábamos a cada instante, siempre mirándonos cómplices delante de otras personas, a sabiendas de nuestro placentero y reconfortante secreto, ni que decir tiene que visitamos todos los días la capilla, nuestra capilla, experimentamos poco a poco nuevas formas y posturas, descubriendo caminos de placer harto olvidados o sencillamente creídos inexi...

El Castillo de Alou (4)

Continuan las memorias de la depravada marquesa y de sus sirvientes. En esta ocasion maese Janot tendra un encuentro inexperado.

El Castillo de Alou

Cuarta parte

Desperté al cantar el gallo, la marquesa seguía dormida, mi boca desprendía un amargor extraño que nacía de las profundidades de mí alma. Me levanté con sigilo temiendo despertarla, mientras me vestía contemplaba las curvas de su cuerpo, de espaldas a mi en posición fetal, las formas de sus caderas terminaban descendiendo hacia sus poderosas piernas, la redondez de su culo me cautivaba. Rodeé la cama hasta encontrarme frente a ella, dormía placidamente, pa...

El Castillo de Alou (3)

Tercera entrega de las memorias de la Marquesa de Alou. Relato de contenido excesivamente depravado.

EL CASTILLO DE ALOU

TERCERA PARTE.

A la mañana siguiente me dispuse nuevamente a pasear, llevaba una vida placentera y contemplativa, era fácil acostumbrarse a las virtudes de mis nuevos días. Quise verme con la marquesa pero un mayordomo llamado Tais, me lo negó, indicándome que la señora marquesa se encontraba indispuesta y no podría atenderme.

Pude averiguar que no se encontraba en la sala de recepciones donde solo eran recibidas las personas imprescindibles por uno de sus lacayos,...

El Castillo de Alou (2)

Siguen las vivencias de la depravada y sexual marquesa de Alou.

EL CASTILLO DE ALOU

SEGUNDA PARTE

Después de la orgia de la noche anterior me encontraba abrumado y sobrepasado por los acontecimientos. Hacia tiempo que el sol coronaba el cielo, aunque aún era fresca la mañana cuando desperté, me vestí con ropa limpia que me habían dejado en mi alcoba, camisa, calzas, jubón azul y botas de cuero de cabra, dignas de cualquier noble. Salí a pasear por el castillo, iba a convertir aquellos paseos en algo muy habitual.

El castillo bullía en un ir y veni...

El Castillo de Alou

Primera entrega de las memorias de la marquesa de Alou. Una menta adoradora del sexo y la depravación.

EL CASTILLO DE ALOU.

El castillo de Alou. Ese era mi destino, una fortaleza perteneciente a la marca hispánica en el suroeste francés, era un pequeño marquesado, aunque autosuficiente y al no estar en la frontera con España, bastante tranquilo, las escaramuzas guerrilleras hacían ya tiempo que habían terminado, desde tiempos de Carlomagno no se producía ninguna. El Castillo se encontraba en lo alto de una colina, rodeado por un pequeño pueblo, el cual había tomado su nombre, Alou, pertenecía al...

El futbol y una buena esposa

Mi esposo me fastidio nuestro planes de sabado noche y los cambio por un partido de futbol en casa con los amigos, aunque al final lo que empezo mal terminaria fantasticamente y eso que siempre me considere timida y buena chica.

Aquel sábado, había quedado con mi marido para salir a cenar ya que hacia mucho que no salíamos a divertirnos, así que estuve todo el día animada e ilusionada con nuestra escapada, dedique gran parte de la tarde a decidir que ponerme, al final opte por un conjunto algo atrevido, botines bajos de tacón de aguja, y vestido de licra negro a la altura del medio muslo, que aunque no era totalmente ceñido, si hacia que se marcara todas mis curvas, y medias negras con ligas, ya que esperaba que aquella salid...

Descubriendo el sexo con mi primo

Un verano, un camping y dos primos con mucha fogosidad.

Soy hija única, me llamo Miriam, suelo pasar las vacaciones de verano de camping en Mallorca, con mis padres, aquel año se apuntaron mis tíos, y mi primo Jonás, hemos sido siempre unos primos muy apegados, nuestra relación siempre fue casi de hermanos, también debido a nuestra edad, ya que prácticamente tenemos la misma, yo 18 y el 19 años.

Bueno como iba diciendo este verano se apuntaron ellos con nosotros, así al menos me lo pasaría mas entretenida con el, ya que a veces me solía aburrir como ...

El hotel nudista

Un matrimonio elige un hotel nudista y algo lujurioso por equivocacion, todo desembocara en un desenlace inesperado.

Hola me llamo Carlos tengo 29 años, soy moreno algo atlético pero sin pasarse, mi mujer se llama Marina tiene 28 años es morena no muy alta, con una cintura de infarto y unas nalgas que cortan la respiración, sus tetas no son excesivamente grandes, digamos que lo justo y necesario, aunque lo mejor es su cara, tiene esa típica cara de picarona, labios sensuales y gestos de lascividad muy naturales

Bueno como cada año nos íbamos de vacaciones veraniegas a algún hotel que solíamos dedicarnos a busc...