Las tetas peligrosas (04)

Despues de escapar con Claudia, la situacion parece cada vez mas confusa.

Las tetas peligrosas (4)

Capitulo 4

Claudia me llevo fuera de la ciudad, la verdad es que no se muy bien cuan fuera de la ciudad. pues tan solo entré en su coche, sufrí como un extraño sopor que me transportó a los brazos de Morfeo, del que ignoro si es macho o hembra pues nunca he conseguido verle la cara.

Despierta Alberto, ya hemos llegado.

Si – dije medio sobresaltado - ¿Dónde estamos?

En lugar seguro.

Pues eso me tranquiliza Claudia.

Vamos sígueme.

Y...

Las tetas peligrosas (03)

Nuestro detective es acusado del asesinato de su amigo. El caso se complica.

Capitulo 3º

Tal como había supuesto, al bueno de Abelardo se lo habían cargado con mi pistola y en ella solo estaban mis huellas dactilares. El inspector Gonzáles estaba frotándose las manos, por que tenia un caso resuelto contra un detective privado y eso le hacia canturrear una canción.

Huelebraguetas, lo tienes muy negro.

Serviría de algo decir que yo no lo hice.

Si te sirve de consuelo, puedes hacerlo, pero de esta no te salva absolutamente nadie, aunque deberías estar cont...

Las tetas peligrosas (02)

De cómo tras el encuentro casual con un auténtico compañero, el gran detective Alberto Zumarras se ve envuelto en el caso mas erótico y sangriento de su vida, capitulo 2º

Capitulo 2º

Entramos eufóricos en el apartamento de la rubia tetona y al cruzar el umbral del mismo ya debía habérseme pasado el efecto de los martines y dado cuenta de que aquel no era un apartamento normal de una buscona de tres al cuarto, pero la mano de la tetona sobándome la polla me hacia olvidar toda precaución y luego cuando me metió uno de sus enormes tetones en la boca, por encima de su ajustadísimo suéter, nada que no fuera ella, me importaba un pimiento. Cuando se sacó la teta del to...

Las tetas peligrosas (01)

De como un encuentro casual lleva a nuestro detective al caso mas erotico y sangriento de su vida.

Las Tetas peligrosas

De cómo tras el encuentro casual con un autentico compañero el gran detective Alberto Zumarras se ve envuelto en el caso mas erótico y sangriento de su vida.

Me di de narices con él.

  • ¡Alberto, pero si es el gran Alberto Zumarras!

  • No me lo puedo creer, ¿de verdad eres tú? - dije sin recordar la cara de aquel individuo que había tropezado conmigo.

  • El mismo Abelardo que viste y calza - y al decirlo me enseñó unos pinreles del cincuenta y algo por lo...