Un grave castigo-2
Continuacion
Pasaron varias paradas hasta que salió de su estado de shock. Meditó qué había pasado, dónde había ido su fuerza. Al final se tranquilizó, no era la primera vez que le pasaba. Ya había pasado por esto cuando el maestro le quitó su fuerza con una técnica que aprendió en un pergamino. ¡Maldito viejo! Seguro que se lo hizo por la mañana, cuando el conflicto de la ropa interior en el estanque. Bien, no era momento de lamentaciones, lo único que podía hacer era visitar la abuela de Champú para que le curase. Per...