La Iniciación De María (2)

María sigue descubriendo lo maravilloso que puede llegar a ser el sexo con su perro. Pero las cosas se salen un poco de control, enloquecida de placer planea como llegar hasta el final...

Aquella fue solo la primera vez de muchas otras. Me volví adicta a Rey, siempre buscando diez minutos de tranquilidad para tumbarme y dejar que me devorara con todas sus ansias. Creo que él también se aficionó al vicio y en más de una ocasión me pareció como si me buscara al efecto, tal vez el sabor de mi coño tuviera algún atractivo especial para el animal que yo desconocía o porque el “tratamiento” al que me sometía me ponía especialmente tierna y cariñosa con él. Siempre lo había querido mucho, por supue...

La Iniciación De María (1)

Una hermosa adolescente se inicia en los placeres de la zoofilia con el pastor alemán que ha sido su mascota durante años

Rey, mi pastor alemán, había sido el regalo de mi padre cuando cumplí doce años. Ahora tengo dieciocho y ha sido mi compañero de juegos y aventuras durante todo este tiempo. Lo que era un cachorro adorable se ha convertido en un hermoso y vigoroso macho, de naturaleza y fuerza que hasta a mí me cuesta dominar en ocasiones. Se podría decir otro tanto de mí. Me llamo María, también he crecido y soy toda una mujer de breves pero firmes pechos, larga melena, vientre plano y, ¿por qué negarlo?, más que atractiva...

Marta (y 7)

Marta decide hacerle un regalo muy especial por su cumpleaños a su hermano: su virginidad anal.

Había sonado el despertador y estaba en ese duermevela en el que acopias ánimos para intentar levantarte y comenzar el día. En eso entró Marta dando la luz, saltando y saludándome con su simpática vocecilla.

  • “¡Buenos días, hermanito! ¡Feliz cumpleaños!”

exclamó mientras se abalanzaba sobre mí, abrazándome y cubriéndome de besos.

Estaba preciosa, como siempre. Iba con su viejo pijama de dibujitos y sin sujetador, noté sus suaves pechos rozándose y ya empezaba a ponerme malo. Pero no parec...

Marta (6)

Marta y su hermano dan el paso definitivo. Pero lo que parecía era el paso final no es más que un punto y seguido en los descubrimientos que este le tiene preparados.

Seguimos con nuestros juegos sexuales durante semanas. Con la práctica ambos mejoramos nuestras habilidades, sobre todo Marta. Se había convertido en una auténtica experta en dar placer, sobre todo conmigo. Había aprendido a anticiparse a mis deseos, detectando e interpretando perfectamente cualquier mínimo gesto por imperceptible que yo pensara fuera.

Aunque nuestra sintonía sexual era evidente y nuestra confianza y cariño mutuos estaban fuera de toda duda, inexplicablemente siempre habíamos esquivad...

Marta (5)

Quid pro quo. Después de la bestial comida de coño por parte de su hermano, Marta decide devolverle el favor proporcionándole la mamada más bestial de sus vida.

Estábamos “entretenidos” en otra de nuestras veladas de placer y ternura. Ya le había dado a Marta su “tratamiento”, una larga sesión de sensual masturbación que la había dejado agotada, satisfecha y más que a gusto. Se dio la vuelta y, cuando ya me relamía pensando en la dulce tortura a la que me iba a someter, vi sorprendido como bajándose del sofá se ponía entre mis piernas diciéndome

-    “Hoy me toca comer a mí...”

Y sin dejarme reaccionar, acercó su boquita a mi pene ya a punto de explotar...

Marta (4)

Marta recibe de su hermano la primera sesión de sexo oral de su vida, experimentando un placer desconocido hasta entonces. Ahora quiere más...

Nuestro siguiente paso adelante en nuestra particular y acelerado curso de conocimiento carnal tuvo lugar unas semanas después.

Alternabamos ya caricias, pajas y masturbaciones más o menos salvajes, aunque nuestro pasatiempo favorito seguían siendo las largas sesiones de masajes sexuales en el sofá, que a veces duraban horas. No era raro sentarnos un sábado por la tarde nada más comer y no levantarnos del mismo hasta la hora de la cena, agotados y satisfechos. Aunque de vez en cuando, cuando yo llegab...

Marta (3)

La lujuria va apoderándose de Marta con cada nuevo truco sexual que le propone su hermano.

Pasaron los días sumidos en nuestra deliciosa rutina, esperándonos mutuamente para darnos placer. Una noche, estando ya Marta masajeándome la polla con toda su sabiduría, comentó como quien no quiere la cosa

-    “¿Sabes quién le da masajes de estos a su novio? Lucía...”

Se me heló el corazón pensando que Marta hubiera comentado con ella nuestras prácticas. Lucía era la mejor amiga de Marta y era un año mayor que ella, lo que marca una gran diferencia a esas edades. Era un palmo más alta, las te...

Marta (2)

Nuevo capítulo sobre el despertar sexual la adolescente iniciada por su hermano.

Al día siguiente no me atrevía ni a mirarla a la cara. Marta seguía como si tal cosa, pero mi cabeza daba vueltas hasta que ni yo mismo entendía mis pensamientos. Arreglamos la casa como siempre, comimos en silencio, seguimos nuestras rutinas vespertinas.

Temía que llegara el momento de después de cenar. No sabía si irme directamente a mi habitación, evitando el peligro y cualquier pregunta. Pero decidí, y ahora sé perfectamente por qué, hacer como siempre y sentarme en rincón del sofá a ver la tele,...

Marta (1)

Crónica del despertar sexual de una muchacha, guiada por su hermano en una espiral de placer ascendente.

Nuestros padres murieron en un accidente de tráfico cuando yo tenía veintipocos años y mi hermana Marta dieciséis. Para entonces ya había abandonado los estudios y me medio ganaba la vida trabajando en un almacén de materiales de construcción. No era mucho y por ello mismo no había podido independizarme todavía, pero entre mi sueldo, la indemnización del seguro y la paga de orfandad que nos quedó daba para poder seguir viviendo en nuestra casa de siempre. Mi tía quiso que nos mudáramos con ella, pero estaba...