Fiestas de barrio

Mi suegra es una persona muy respetable, pero un poco de vino hace milagros

Lucía y yo nos casamos hará más o menos un año, somos bastante jóvenes, Lucía tiene 22 y yo 23. Ella es una chica preciosa. Tras cuatro años de noviazgo los dos teníamos claro que queríamos estar juntos.

En septiembre son las fiestas del barrio donde creció mi mujer. El barrio se engalana. En la plaza principal, a pocos metros del piso de mis suegros, montan un escenario y traen algún grupo para amenizar la noche. Se instalan un par de barras y los vecinos beben, comen, bailan y en general lo pasan bi...

El plan perfecto

Urdimos un plan para incitar a mi mujer a realizar un intercambio de parejas y casi todo salio bien... casi todo

Ya había coincidido con Rafa en varias ocasiones, era uno de los mejores vendedores de la empresa, envidiado por todos, además resulta que era un tío encantador, simpático y bastante divertido. En aquella ocasión, nos encontrábamos en una formación en Madrid y cuando todos se fueron retirando a dormir, nosotros decidimos tomar una última copa en el mismo hotel donde nos habían alojado. Los dos íbamos ya más que contentos, hablamos de todo un poco, criticamos a nuestros jefes, como es natural y terminamos ha...

Del dicho al hecho

Nos gustaba fantasear que lo hacíamos con otras personas, pero un buen día pasamos a la acción.

Hace unos mese se instaló en el piso de al lado Juan, un guapo joven de unos 30 años que había venido temporalmente a la ciudad por trabajo.  Lo conocí en el ascensor, además de guapo también era bastante simpático y pronto congenió también con mi marido. Ernesto y yo  ya rondamos los 40, los dos nos cuidamos bastante y nuestros cuerpos lo agradecen, yo voy asiduamente al gimnasio y eso ayuda a que mi figura siga siendo la envidia de mis amigas. Mi culo está duro y erguido, y mis tetas, tienen un buen tamañ...