Era sólo un juego… ¿o no?

El amor de hermanos no puede estar prohibido

Era sólo un juego… ¿o no?

El amor de hermanos no puede estar prohibido.

Ha pasado tanto tiempo… al menos lo parece. Es uno de los recuerdos más intensos de mi adolescencia e indudablemente una de las experiencias que más ha marcado mi vida. No es sólo la intensidad del recuerdo, sino lo que significó en mi desarrollo y mi descubrimiento de las relaciones humanas, de la intimidad sexual y del erotismo -ese erotismo sereno del amor de verdad-. ¿prohibido? Sí, supongo que antes de aquel momen...