Mis chicas de la oficina

Una chica me invitó a ayudarla a probarse un corset. Esta es la historia de lo que pasó dentro del probador.

Salí de mi despacho para ir a buscar a Adela para bajar a desayunar.

Eramos compañeros en la administración, yo jefe de servicio, ella secretaria del Secretario General. Nos veíamos a menudo por motivos del trabajo, y ella siempre ponía vocecita melosa para dirigirse a mí. Muchos días desayunábamos juntos y poco a poco fuimos adquiriendo confianza, ella sobre todo, hasta el día que me dijo que si le acompañaba después del desayuno a una compra que tenía que hacer.

Le dije que si, y nos enc...