Violado por la boca por un heterazo, final
Jugaba a que me castigara y me tratara como una zorra... Y esta vez (la última) fui humillado, de verdad.
¡Buenas, relateros!
La casualidad quiso que estuviéramos varios meses sin quedar mi macho favorito y yo. Claro que, entremedias, fui avanzando en mi doctorado como mamón profesional y ya olvidé mi miedo de que viniesen desconocidos a casa para que me rompieran la boca y el culo a pollazos.
Me faltaban pocas semanas para cumplir los 20 años, y para estar a punto para mi cumpleaños me metí especial caña en el gimnasio. Mejoré mi abdomen y pectorales, los cuádriceps siempre los he tenido señalados,...