El Señor Cosquillas (revisado)
La sorprendente historia de una niña y su peluche, el Señor Cosquillas.
—Me preocupa Sandra.
Fernando apartó la mirada de la tele, pese a que sabía que se perdería la persecución en coche que, según decían, era la mejor escena de la película. Tras luchar para reprimir un suspiro de hastío, forzó una sonrisa y miró a su mujer, Majo.
—¿Por qué, cariño?
Antes de que la aludida pudiese responder, una adolescente apareció en el salón con los ojos abiertos como si hubiese visto un fantasma y comenzó a buscar por el sofá con desesperación hasta que encontró un viejo...