Siempre fuí y seré una puta

Tenia ilusión por pasar esos días con mi chico, pero alguien inesperado me hizo volver al pasado y comportarme como la puta que siempre he sido.

Desde muy pequeña siempre he sido una de esas niñas que la encantaba estar rodeada de niños en el colegio, usando mis armas femeninas para atraerlos, como si fuesen abejas y yo la colmena. En los recreos jugábamos a beso; todos los niños corrían detrás de mí, con el fin de alcanzarme y recibir su recompensa, un simple beso en la mejilla.

Me llamo Fátima, tengo 24 años y quiero contarles mi historia.

Soy una chica morena de ojos negros, nunca he creído que sea guapa de cara pero tampoco nad...