Una merecidas vacaciones familiares
Estas son las primeras vacaciones desde que trabajo con D. Andrés, la idea es pasarlas en familia, pero un inconveniente de última hora da un giro inesperado en ellas
Después de aquella noche, mi vida sexual se había calmado bastante, tal vez, el tener ahora clara cuál era mi postura ante todo lo experimentado en los últimos meses, me hacía sentir liberada, por otra parte, había conseguido dejar de lado aquella ansiedad cada vez que algún hombre intentaba algo conmigo, y que me hacía abandonarme a sus deseos.
Habían sido unas gratas navidades, comencé el año con una ilusión como no había tenido en mucho tiempo pues parecía que la vida volvía a sonreírnos. Seguían p...