Las reglas del juego
Cuando Marta me propuso formar parte de un trío con Carlos y ella, me excitó la idea. Al explicarme sus reglas del juego, acepté sin pensarlo.
LAS REGLAS DEL JUEGO
Entre los labios de Marta y los míos, la polla de Carlos, altiva, erguida, las venas intensamente marcadas en la piel lubricada por nuestras lenguas moviéndose al unísono, el capullo al descubierto, ancho y rosado, deliciosamente suave en el roce con el paladar cuando, a turnos, nos los intercambiábamos para apropiarnos de él en exclusiva, chupándolo y haciéndolo desaparecer en el interior de las bocas hambrientas. Carlos de pié, las piernas ligeramente abiertas, las manos en...