Inocencia caribeña, Pervertida -7-
La relación con madre e hija parece totalmente rota, conozco a alguien que no me imaginaba poder encontrarme y además tengo una visita inesperada que puede provocar todo un terremoto en esta morbosa historia.
Después de todo lo que aconteció esa noche y de lo que Lizbella acababa de enterarse, nada volvió a ser igual. Estuvimos discutiendo la madre y yo durante un buen rato. Estaba rabiosa más por haberse dado cuenta que la engañe, de que su inocente hijita haya sido iniciada en los placeres del sexo a sus espaldas.
Al principio solo gritaba y decía todos los insultos que se le pasaban por la cabeza, después empezó a llorar para soltar toda la impotencia y resignación.
-Creía que me amabas...- me dec...