Noches de calor
El insomnio y el calor se juntan para hacer que una aburrida chica decida jugar consigo misma sin percatarse que pronto un expectador se sumará a su juego. Tío/sobrina
Son pasadas de las dos de la madrugada. Mis padres duermen, al igual que mi hermano mayor. La casa permanece en un silencio mortífero, tanto así que si cierro los parpados y me dejo llevar por la tranquilidad de la madrugada seguramente podría escuchar como cruje cada pequeña astilla de la casa en su sueño reparador.
Sin saber por qué no he puedo conciliar el sueño, he tratado de contar ovejas y he llegado casi a mil y no ha dado resultado. He tratado de jugar con el móvil o ver videos, pero la luz...