Establo Romano (II)

Segunda parte del relato.

Establo Romano II

Al despertar el capitán, no supo reconocer la habitación donde se encontraba. Estaba desnudo y se sentía aturdido. Entraron al cuarto dos esclavas, que le proporcionaron una toga de lino. Una vez vestido, salió rumbo al jardín que se divisaba desde la ventana.

Allí pudo ver a un grupo de unos 50 hombres altos y corpulentos. Pudo reconocer a algún compañeros de armas y quizá a uno de los gladiadores que había visto en el circo recientemente. Todos eran hombres jóvenes y fu...

Establo Romano

Primera parte del relato. Un emperador romano encuentra una peculiar fuente de la eterna juventud.

Para algunos en palacio no era ya un secreto, pero nadie hablaba abiertamente de ello.

El emperador, a sus 45 años, inmensamente poderoso y rapaz, todavía en pleno uso de sus facultades físicas, empezaba apenas a experimentar un insignificante deterioro, propio de su edad. En verdad se trataba de muy poca cosa, algo de cansancio a alguna hora de la tarde, unas pequeñas líneas en el contorno de los ojos, verdes y atigrados. Todavía nada que le impidiese lucir con orgullo el manto real sobre su an...