Orina en los bolsillos Parte II y última
No pasaron ni media hora cuando a lo lejos aviste dos figuras, una más rellenita y la otra de complexión más delgada. A medida que se iban acercando al lugar en el que me encontraba, comprobé que una de esas figuras que lo lejos distinguí, era Ari, pero a la otra persona no la conocía
Después de lo que me pasó esta mañana en la playa, no podía dejar de pensar en Ari, así se llama la chica con la que me ocurrió esta grata experiencia. Para los que no lo hayan leído deberían leer mi anterior relato.
Solo pensaba en lo que había experimentado y sobre todo en lo que podría suceder mañana, ¿Estaría Ari mañana en la playa? ¿Tal vez, se echaría atrás? Mi estado era de nerviosismo, ansiedad. Tenía ganas de volver a comerme ese peludo coño, y follarme su culo, y bañarla en leche.
Al f...