Diario de mi vida
La sensación de estar desnuda con Enrique me daba mucho morbo, me gustaba que me besara y me manoseara, que me tratara de masturbar mientras yo gemía quedito, sus manos eran torpes pero me hacían sentirme en la gloria, esa tarde desee que me lo hiciera pero pudo más mi miedo de quedar embarazada que
DIARIO DE MI VIDA
Cuando llegaron las vacaciones la diversión no bajo de ritmo, ya que Enrique fue el único de la pandilla que no salió de vacaciones. Cuando su mamá salía al trabajo yo llegaba alrededor del medio día y aprovechábamos para jugar y disfrutar.
Desde el primer día que estuvimos solos platicábamos de todo lo que se nos ocurría, para terminar en el sofá y mientras yo quedaba boca abajo y se la chupaba, él se entretenía metiendo sus manos bajo mi falda, levantándola y acariciándome la...