La muñeca

"Soy el modelo Ak64 y he sido creada para dar placer. Después de la configuración puedes usarme a tu antojo y cambiar los ajustes de mi sistema según la ocasión", acaba de decir la autómata con la que por primera vez cumpliré mi más grande fantasía.

I

Siempre he querido poseer a una mujer hermosa que termina cansada su día y se dirige a casa. Me encanta cómo se les marca la ropa interior en sus enormes nalgas aprisionados entre faldas ejecutivas o uniformes médicos. Muchas veces seguí a alguna en hora pico, entre una multitud de transeúntes soñando con hacerla mía en un bosquecillo solitario o en una obra abandonada.

A pesar de mi obsesión, nunca me atreví a tocar a ninguna. Siempre pensé que cualquiera de esas mujeres lucharía por miedo a...