Vida animal (5)
Cuando entraron Justino y Javier, tampoco se sorprendió. Les gustaba hacerlo juntos. Era fácil y sin complicaciones, uno por el culo y otro por el coño. . Terminaba sonriendo cuando se corría y veía los ojos en blanco y los espasmos de impotencia de la esclava. Savia perfectamente que ella no podía correrse.
VIDA ANIMAL 5
Aquella noche, como casi todas las noches, una vez terminado su trabajo, se ocupo de satisfacer a los empleados del patrón. No siempre acudían todos, y en concreto en ese momento, 5 hombrees esperaban sentados tranquilamente a las puertas de la fabrica. El patrón entro, amarro su animal en el establo, le quito el bozal, y le hecho de comer. A continuación se dirigió al interior de su fabrica, donde comprobó meticulosamente que sus empleados cumplían el pacto que habían hecho 7 mese...