Encuentro casual

Despues de mucho tiempo de no escribir me desidi a publicar esta historia de un encuentro casual besos

Hola comunidad  antes que nada les dire qe este es mi relato después de mucho tiempo

ENCUENTRO CASUAL

Como saben me llamo Andrea tengo 23 años soy morena clara mido 1.76 delgada  pelo largo castaño

Esta es una pequeña historia  ocurrió en una noche de verano saliendo de la oficina me sentía algo animada por terminar con un cliente un proyecto de trabajo y quería celebrar la meta cumplida.

Caminando por la calle y escucho que alguien en la calle me llama su voz se me hace fami...

Andrea y su tía

“No sé cómo te digo estas cosas, Andrea” Mi tía rió nerviosa, recogió sus piernas, dejando a la vista una buena parte de sus muslos, y dejó a un lado el diario con su foto en traje de baño.

Andrea y su tía

"No sé cómo te digo estas cosas, Andrea"

Mi tía rió nerviosa, recogió sus piernas, dejando a la vista una buena parte de sus muslos, y dejó a un lado el diario con su foto en traje de baño. Estábamos en su dormitorio, comentando las incidencias del concurso de belleza para señoras al que le había insistido que participara y hoy había aparecido en la portada del periódico, luciendo su hermoso cuerpo enfundado en la blanca tela del traje de una pieza. Había logrado vencer...

Andrea y el vecino

les agradesco a todos sus comentarios y darme animos a seguir adelante en especial a Salvador Yoli y Mario gracias por su amistad bueno ahora les dejo la continiuacion del relato

Autor: Salvador y andrea

Andrea y su vecino mayor de edad

Le he visto nuevamente. Nos encontramos en el ascensor y se acercó a mí, como acostumbra hacerlo, pues sabe que me pone nerviosa. Me preguntó por el colegio y se interesó por saber cómo me iba en los estudios, pero todo sin dejar de mirar mis senos. Yo estaba toda colorada, sintiendo el peso de su mirada y porque me di cuenta en ese momento que no había abrochado los dos botones superiores de mi blusa, debido a lo cual mostraba más d...

Una ducha caliente

Era una tarde calurosa. Había regresado del colegio y no había nadie en casa. Era la tarde perfecta, pues no había nada que hacer y quería seguir haciendo lo que había descubierto la noche anterior

Una ducha caliente

Era una tarde calurosa. Había regresado del colegio y no había nadie en casa. Era la tarde perfecta, pues no había nada que hacer y quería seguir haciendo lo que había descubierto la noche anterior: darme placer, jugar con mi sexo y sentir mis pechos duros. Llego a la ducha me quito mi uniforme de colegiada. Me veo en el espejo y compruebo que estoy dejando de ser una niña y que mis pechos están creciendo. Me toco los pezones rosados y duros. Mi culito está redondo y parado. M...