Confesiones

Mi primera salida a la calle vestido de mujer, una experiencia muy excitante...

Desde muy niño despertó en mi el deseo de vestirme de mujer, fascinado por todo aquello que no correspondía con mi condición masculina, envidiaba el comportamiento en general de las niñas, pero aquello estaba vetado para mí, un muchacho debía tener una actitud poco afeminada y ser un machote, no obstante me encantaba jugar con muñecas y cambiarle los vestidos a la Nancy, cuando no tenía muñecas travestía a mis viriles madelmanes confeccionando vestidos con trozos de retales de costura de mi madre. Cua...