¿Mi primera vez? Pues fue con mi tito Andés.

Relato ambientado en el Madrid de los años 50. Una jovencita, huérfana de padre es iniciada al sexo por su tio.

Mi tío Andrés, al igual que mi padre, también era ferroviario. Trabajaba en aquel ferrocarril que parecía de juguete que partiendo de la estación de Goya llegaba hasta el pueblecito de Almorox. Al ritmo del tran-tran, en una especie de autobús que iba por la vía del tren tardábamos una hora y pico en llegar a nuestro destino.

Era el verano de 1953 y debió ser en julio. Mi tío era el “maquinista” como pomposamente se autodenominaba. Era un hombre grandote, con un poblado bigote. Seguía soltero y despué...

Donde y con quien menos lo esperaba (y III)

Depués de entregarme a un desconocido, me utiliza como juguete sexual.

DONDE Y CON QUIEN MENOS ME LO ESPERA (y III)

Si vas a leer la tercera parte, gracias. Eso quiere decir que te has leído las dos anteriores.

Este relato lo he subido a Infidelidades, por continuidad con el anterior. Podría haberlo también publicado en Sadomaso o No Consentido. Opinar vosotr@s

*Quiero deciros que esta tercera parte es ficticia. Las dos primeras, me sucedieron más o menos así. Esto sucedió hace muchos años y no puedo reproducir exactamente como fueron los diálogos...

Donde y con quien menos lo esperaba (II)

Mi deseo contenido se lo entrego a un extraño.

DONDE Y CON QUIEN MENOS ME LO ESPERA (II)

(Segunda parte de mi experiencia. Podéis leer el primer capítulo en Hetero-general )

El que debía ser el dueño y dependiente, de unos 50 años, pero de aspecto agradable, estaba atendiendo a dos señoras.

Cuando sonó la campanilla que había sobre la puerta, se giró, me miró largamente y me dijo:

-Enseguida le atiendo, señorita-

Me hizo gracia lo de señorita. Mi alianza era bien visible en mi mano. Los adolescentes, pasaron d...

Donde y con quien menos me lo esperaba. (I)

Luchando con mi marido y el renacido deseo después de seis meses de abstinencia por mi embarazo.

DONDE Y CON QUIEN MENOS ME LO ESPERA (I)

En anteriores relatos ya me he descrito y os he confesado que tenía 45 años. Bueno, ya son 46.

Vivo y me casé por la iglesia, en una ciudad del noroeste de España, con 23 añítos. El que se convirtió en mi marido era un guapo economista, algo mayor que yo, con ambiciones, ambos de convicciones religiosas. Yo había acabado la carrera de farmacia en Santiago, donde tuve algún noviete, sin mayores consecuencias si exceptuamos mis primeras felaciones....

Abusaron de mi en un cine (y 2)

Despues de mi experiencia en un cine (No consentido)Decido saciar mi deseo a ciegas.

ABUSARON DE MI EN UN CINE (y 2)

(Continuación de la narración anterior)

Martes 16:45

Me encontraba dentro de mi Audi, en el parking del centro comercial, buscando desesperadamente un impulso en mi conciencia para vencer la tremenda carga de excitación y morbo que me había llevado hasta allí.

Debía estar en la oficina, pero alegué una indisposición por el periodo y salí a las 3. Antes de acceder al coche, pedí un te en una cafetería cercana y me cambié en el servicio la eleg...

Abusaron de mi en un cine

Lo que os voy a contar me sucedió en un cine de un centro comercial de la ciudad que vivo del noroeste de España.

ME MASTURBARON EN EL CINE

Me llamo Ana tengo 46 años y llevo 22 años casada. Si, me casé jovencita enamorada de mi marido, algo más mayor que yo (10 años). Pronto llegaron los hijos. Susana, Javier y más tarde, Claudia.

Lo que os voy a contar me sucedió en un cine de un centro comercial de la ciudad que vivo del noroeste de España.

Con motivo del estreno de Shreck, en el año 2001 y aprovechando que mi marido iba al fútbol, me llevé una tarde de sábado a mis hijos de 7 y 4 años al cine.

...

Lo necesitaba y lo encontré.

Mi marido me ha olvidado por sus compromisos sociales y laborales. Necesitaba sexo y me lo dieron.

Hola, me llamo, pongamos Ana. Soy la esposa de un hombre muy conocido socialmente en una ciudad del sur de Galicia, de ahí el pretender preservar mi intimidad. Tengo 45 años y soy madre de familia numerosa. A pesar de ello, mi figura aún hace girar la cabeza a muchos hombres en la calle. De talla tirando a alta, mi rubio cabello cortado en media melenita, enmarca un agradable rostro, donde destacan dos llamativos ojos grises.

Mi marido es un hombre muy ocupado. Entre reuniones, viajes y conferencias...