Mi virgen Marcos
Él era virgen y yo la putita del Campus...
Sus compañeros de piso no estarían en casa en toda la noche, así que Marcos me invitó a dormir. Compramos algo de cena y de camino a casa pasamos por un videoclub, en el que alquilamos una película algo subida de tono.
Después de la cena nos tumbamos en el sofá y pusimos la película. Definitivamente era muy subida de todo, pero era un porno más sutil del que se suele ver normalmente, es decir, se veían las caras de placer de los protagonistas, se oían sus gemidos, se veían los enormes pechos de l...