Blanca necesita practicar

Tenemos chica nueva en la oficina. Se llama Blanca y tiene que aprender lo que es el trabajar en un entorno profesional o no sé qué mierdas.

No sé a quién se le ocurrió la idea, ni tampoco si hay algún motivo oscuro detrás de todo este asunto, pero tengo que reconocer que quien pensó este asunto de las prácticas en empresas es un jodido genio. O a lo mejor, no, pero me da igual. Me da igual si en realidad el que lo inventó es un retrasado que estaba pensando en alguna gilipollez, como mejorar el nivel de preparación de nuestros jóvenes universitarios (el futuro del país, no lo olvidemos nunca) o alguna mierda de estas. Si un burro pega una coz e...

Compatibilidad laboral

Es horrible trabajar un sábado por la noche, cuando todo tu cuerpo está interesado en millones de cosas que no tienen nada que ver con trabajar un sábado por la noche.

Trabajar los sábados es una mierda y para el que quiera saber por qué, se lo puedo explicar muy rápidamente. Porque es sábado. Porque es de noche. Porque es sábado por la noche y tú estás trabajando. Porque todo el mundo está de fiesta y tú estás trabajando. Porque no sé por qué los sábados son los días en los que tienes especialmente ganas de pillar a alguna chica y llevártela a tu casa para echar un buen polvo. No se por qué. No sé por qué los sábados en particular. Probablemente porque el cuerpo, aparte...

Lulu

Una nueva vecina

22:00 Estoy agotado. Todo el día reunido, desde las ocho de la mañana reuniones, reuniones y reuniones, hablamos, pero nunca llegamos a nada. He llegado a la oficina a las ocho, como siempre. He tenido una noche de mierda. Esa casa está llena de ruidos, es una casa nueva y las tuberías se retuercen como una olla de gusanos en el fuego. A las nueve he visto a Marta al fondo del pasillo. Me lanzó una mirada que no supe entender. Estaba muy elegante. Llevaba un pantalón negro y una chaqueta corta, muy profesio...

Big

Cosas de Big.

Tengo un amigo del que no recuerdo el nombre. Es decir, recuerdo cómo le llamo yo, y como le llamamos todos en el barrio. Le llamamos Big John, pero Big John, también tiene un nombre real, tiene que tenerlo, y ese es el que no recuerdo. Me parece que es Iván, o Mauro, quizá. No lo sé.

Big John, claro, es un tipo grande. Aunque seguramente si sólo fuese un tipo grande, le llamaríamos Bigfoot, Yeti, Frankenstein, Shaq o cualquier cosa así. Si llamamos a Big John, Big John o Big Beng, o algunas veces,...

Un tipo con principios

Soy un tipo con principios, pero también un pobre barquito perdido en la tormenta de mi destino. A veces las cosas pasan y no porque yo quiera.

Yo soy un tipo con principios. Todo el mundo lo sabe. Nunca robo, a menos que realmente, y con esto quiero decir, REALMENTE, tenga que hacerlo. Nunca le pego a una mujer, a no ser, eso, que realmente no tenga otra opción. Cuando veo a alguien con un cartel en la calle, diciendo que tiene tres hijos y que ha perdido su trabajo, casi siempre me meto la mano en el bolsillo y le doy lo que encuentro, aunque yo no esté realmente muy bien de dinero y no debería ir por ahí regalando mi dinero. Pero, coño, cuando v...

Nunca he sido un romántico

Nunca he estado dotado para el romanticismo. A cambio, soy un formidable comedor de coños. Las mujeres aprecian lo uno, pero no entienden lo otro y esa es la tragedia de mi vida

Nunca se me ha dado demasiado bien el romanticismo. Lo intento, pero no es lo mío. Me siento ridículo enviando flores o diciéndole gilipolleces a una tía sólo para poder llevármela a la cama. Lo único que quiero es un poco de meneo entre las sábanas, meterle la polla un poco, correrme y no me molesta si, mientras tanto, ella también pasa un buen rato. Pero para algunas tías esto parece que no es suficiente.

Hace poco quise echarme una novia. No voy a decir que una novia formal, porque eso de las novia...

Primer día

Cosas de la crisis. Una chica tiene que aceptar un trabajo en una linea erótica.

Nada era difícil, pero Rafael lo explicaba todo dos, hasta tres veces y en cada cosa, por sencilla que fuese, ella tenía la sensación de que todo iba a salir mal.

Y es que todo parecía mal montado. Cada cable de aquella oficina parecía estar mal sujeto, o mal puesto, o mal escogido. Siempre por alguna razón indecible, pero evidente. En cambio, todo parecía, al mismo tiempo, perfectamente funcional y se sorprendió por la limpieza y la luz, que caía desde un montón de fluorescentes en el techo, una abru...