Mío
De cómo preparo a mi esclavo para penetrarle el culito de putito caliente que tiene... y me lo follo con un arnés.
Mío.-
En mi relación con mi esclavo no puedo dejar de tener emociones y sentimientos hacia él. Yo, que siempre me creí por encima de esas debilidades, tengo que confesar que a medida que se vuelve más dócil, mi dulce y tierno rubio, me va robando el corazón. Cuando pienso que no me ve me detengo a mirarlo con cariño, con verdadero amor. Me acerco a oler su sueño como si de un bebé se tratara y paso mis dedos a dos centímetros de su barbilla, los arrastro sin tocarlo por su pecho hasta la cruz mi...