De película (IV)

Se verá metio en una pequeña orgía...

Recargué la escalera en la pared suavemente, tratando de hacer la menor cantidad de ruido posible. Una vez que quedó bien asentada, subí con cuidado cada escalón hasta llegar a la parte superior de la barda del patio de mi casa; de ahí al primer piso de la vecina casa en construcción había solo un paso que dar, y lo di. Me aferré lo mejor que pude a la pared, y me levanté hasta entrar por ese ventanal que todavía no tenía vidrio ni ventana. Supongo que este va a ser un estudio, aunque tiene la...

De película (III)

Aquella noche iba vestido de mujer y sus planes se le habían echado a perder. Su taxista la intentaría consolar mientras unos representantes de la ley les interrumpían.

Apenas había cerrado la puerta de la calle y dado unos cuantos pasos, cuando algunas pequeñas gotas de lluvia empezaron a caer, tímidamente, desde el cielo. Era un contratiempo enorme el que fuera a llover, suponiendo que esta noche había sido elegida y planeada muy especialmente y con mucha antelación. Suspiré, porque contra la lluvia inesperada no tenía ninguna arma. Ni siquiera traía paraguas, apenas mi bolso con algunas cuantas cosas que podía necesitar. Caminé con relativa prisa, porque a pesar...

De película (II)

En los servicios del Museo Nacional de México va a ocurrir algo fantástico.

Bueno, esto más que ser un relato de película, es un sueño que tuve hace algún tiempo. Estaba caminando por los pasillos del Museo Nacional de Antropología e Historia de aquí, en la Ciudad de México. Todas las salas estaban desiertas: en la librería que está en la entrada no había una alma, los grandes salones de etnografía, en la planta alta (llenos de trajes regionales y reproducciones de chozas e instrumentos musicales y de labranza indígenas) se encontraban en igual situación; incluso en el patio con su...

De película

Nuestro protagonista entra a un cine X y cambia sus ropas por unas de mujer. A partir de ahí no recibe y da más que placer de los muchos hombres con que se encuentra deambulando por la sala y los urinarios.

Ese día era un sábado en la mañana. La luz del sol en la ciudad de México empezaba a calentar riquísimo, y sin embargo un ligero viento refrescaba el ambiente, el clima perfecto que a mí me gusta.

Ese sábado en la mañana llegué muy temprano al centro de la ciudad, donde hay un cine de gran tamaño que en los últimos años incluye en su programación solamente películas tipo xxx, y que es muy frecuentado por homosexuales de todas las categorías. Ese día estaba decidido a hacer realidad todas (o por lo men...