Perdiendo a la mujer de mi vida 2
y así empezó mi historia con Silvia
Esa tarde me pude haber ganado el premio nobel de la felicidad, estaba muy contenta de que me hubiera aceptado, como breviario cultural, me gustaban las mujeres como desde que tengo memoria, pero nunca había salido con nadie, es decir sí, un chavito en secundaria, pero no cuenta, porque fue más presión social, que ganas de estar con él. Así que estaba hecha un manojo de nervios. No es posible que ese día en todo el closet de 3x1.5 no haya encontrado nada que usar. Estuve toda la tarde haciendo más de...