Juegos
Mi primo mayor y yo.
Me dijo que entrara en su habitación y que me escondiera que ibamos a jugar a un juego muy divertido.
Roberto, que asi se llama mi primo, tenia 23 años frente a mis 12. Apagó la juz de su cuarto, el juego comenzaba, yo me escondí en el interior de su enorme vestidor y me oculté entre numerosos trajes con olor a naftalina y a perfume masculino. Roberto recorría su cuarto sigilosamente en mi busca hasta que sentí como se abria la puerta del vestidor y las perchas, con sus respectivos trajes, se mo...