Le gusta hacerme de rogar

Cuando imaginas tus fantasias sexuales hasta que la ficción supera la realidad.

Jamás me había sentido tan liberada sexualmente como hasta ahora. Cada roce, cada beso, cada caricia es una nueva experiencia que se convierte en un calor sensual saliendo de mi pecho y que baja hasta mi clítoris convirtiendo en fuego cada parte de mi incluyendo mi alma. Hace que me convierta en una perra insaciable hasta querer recrear todas y cada una de mis fantasías sexuales y oscuras. Cuando lo visite anoche no esperaba que su juego se tratara de convertirme un su sumisa sexual con ganas de todo y mas....