Amor Imprevisto (3)
Unos minutos después y arrepentida de lo cobarde que había sido decidí llamar a mi amiga y pedirle consejo.
Ya no podía dar más pasos estaba justo delante del portero, mi cabeza comenzó una tortuosa batalla de si salir corriendo o tocar el telefonillo, llevaba allí más de diez minutos y cuando parecía que por fin había decidido llamar al timbre, escuche dos voces féminas que procedían de dentro del portal, una me resultaba muy familiar y pronto me di cuenta que era ella, con el miedo metido en el cuerpo me aleje a toda velocidad de aquel lugar, pude girar la cabeza y observar que era ella junto a otra mujer...