Ojos de Esmeralda. VII Parte
Tomé su mano y la retiré de mi rodilla, ella puso su cara muy seria y se recostó contra la ventana del vehículo. De igual manera lo hice yo, casi nos dábamos la espalda.
Nos fuimos en la camioneta, mi papá manejaba, Verónica iba a su lado. Cristina y yo íbamos en la parte de atrás. No está de más decir que me sentía incomoda al tenerla a mi lado. Casi me da un micro infarto cuando colocó su mano en mi rodilla y me acarició lentamente, mientras sonreía de lado con picardía.
(Cristina te voy a matar!!)....
Tomé su mano y la retiré de mi rodilla, ella puso su cara muy seria y se recostó contra la ventana del vehículo. De igual manera lo hice yo, casi nos dábamos la...