Una velada para compartir

Era como una gran obsesión, que su mujer follara con otro hombre y de la manera más imprevista, una noche hicieron realidad sus cachondas fantasías.

Cuando por primera vez leí, hace dos años, un relato en el que un hombre decía sentir un enorme placer al ver a su esposa mientras era penetrada por otro, lo primero que me vino a la mente fue que se trataba de un desquiciado y que esa relación no era precisamente la de un matrimonio, muy pronto me iba yo a dar cuenta de lo equivocado que estaba sobre el asunto.

La curiosidad por saber mas de esto se fue convirtiendo en obsesión y mientras más relatos leía poco a poco empecé a desear explorar nu...