De grupy

Mi cantautor favorito... y su novio... y el guitarrista y el del teclado... ¡les cuento?

GRUPY

ANTES

Yo era su Grupy y me emocioné todita cuando me aceptó en facebook y luego, una noche, muy noche, que lo vi en línea, me atreví a coquetearle abiertamente y él me respondió y así estuvimos durante unos meses. Y cuando fue a mi ciudad a dar un concierto, nos encontramos la tarde anterior, paseamos y luego, fundimos sus 40 con mis 23, su cuerpo delgado y moreno, su barba rasposa, con mi cuerpo joven y elástico durante largas horas. En contra de sus deseos me fui a las tres de la...

Gajes del oficio

Esta vez, la puta de lujo paga por sexo de lujo: vueltas de la vida.

La otra cara de la moneda

Hace casi tres años abandoné el ejercicio de la abogacía y a mi regio pero ojete amante y, entre otras cosas que empecé a hacer, para mantener mi nivel de vida me afilié a una agencia de acompañantes. Tenía yo entonces 26 años, me había teñido unos tonos cobrizos en el pelo, que me llegaba a media espalda, medía el 1.74 de basquetbolista y mis medidas eran mejores que perfectas (hoy no: ahora mido 65 de cintura), gracias a mis genes, la buena educación y el sano ejercic...

Vístete de putita, corazón, vuélveme loco...

Mi iniciación en la bisexualidad, a manos de mi maduro amante y su bella rubia...

Vístete de putita corazón, vuélveme loco

Otro día contaré, o quizá ya he contado y lo olvidé, cómo me hice amante de Lucas Rangel, mi profesor de derecho romano, prestigiado abogado postulante que tenía unos cuarenta y cinco años aquella mañana en la que, en lugar de entregarle mi trabajo de fin de cursos le entregué mi tesorito, me entregué toda, sobre el escritorio de su buffette, en un décimo piso de la colonia Roma, con enormes ventanas orientadas hacia el sur.

Aunque aún no cumplía los...

Tres rubios en la carretera

Una vez que alcanzó mi punto más profundo, donde se detuvo el tiempo que le llevó soltar un gemido de placer, Carlos empezó a entrar y salir en mi, desde los güevos hasta la punta, en fuertes y regulares embates. Era una vergota deliciosa y educada, que me llegaba hasta el centro del placer. Carlos me la metía sin cansarse y el tiempo pasaba. de pronto sentí una verga en mi boca y la empecé a mamar, pero mecánicamente, concentrada del todo en la cogida que me estaban dando.

Tres rubios en la carretera

Imagínenme una tarde de viernes parada en la salida a Cuernavaca, levantando el dedo pulgar ante los coches que me gustaban (mercedes, audi, BMW), vestida apenas con una mini de mezclilla, mis sandalias gucci y una blusita de tirantes, ajustada, que mostraba mis chichis mejor que si no trajera nada.

En menos de diez minutos se detuvieron tres chicos, güerejos, de no mal ver. Hermanos o primos, evidentemente, de aproximadamente treinta años.

-¿A donde van?-...

Ayudándome a recordar

Mientras recuerdo cómo seduje a los dos rubios hermanitos, busco fotos adecuadas y me inserto un brillante consolador.

Ayudándome a recordar

(Amor filial)

Tenía 19 años, muy poco dinero y ganas de playa y fiesta así que no me lo pensé más y una tarde me subí a un Estrella Blanca con mi maxifalda, una linda blusa, huaraches coquetos y seis prendas de vestir en mi mochila incluido el bikini. Mis últimos pesos los gasté en el taxi para llegar al mayan palace de Acapulco, un hotel que siempre me gustó, en mi playa favorita, aunque nunca, nunca me había hospedado en el.

Tengo muy buen tipo, aunque no esté...

Fantasía cumplida con mi autor

Cogiéndome a mi autor de relatos favorito (¡la realidad supera a la fantasía!)

Fantasía con mi autor

¿Querían sexo con sentimientos?, ¿querían descripción de personajes?: pues ahora lo tienen, porque dejé a la mitad una historia inspirada en "La autoestopista" de Danielito y en mis propias experiencias y otra de cómo me cogí a dos gemelos en Cancún, para contarles esta. Y se chingan.

Cuando publiqué en internet los tres relatos que he escrito, llovieron a mi buzón (creado ex profeso) docenas de mensajes de guarros, calentureitors y necesitados de toda especie que quer...

Amarrados para mi

Los tenía a mi merced, desnuditos, mudos, amarrados a las sillas, las vergas bien paradas... a los cinco. ¿qué haré?

Me costó trabajo perder pero lo logré: ya bebidos y fumados, los amigos habían estado insistiendo en que el juego de la botella, que el juego del beso, que les enseñáramos las tetas, hasta que Karla dijo:

-Yo diría que sí, pero no quiero perder el virgo hoy, con ninguno de ustedes, ¿qué me lo garantizaría?

-Lo juraríamos -dijo uno de los chicos.

-No te creo -contestó ella-. Me han dicho que la verga parada no entiende razones.

-¿Y si los amarramos? -sugerí yo, atendiendo una viej...

¡Viólame!

Harta de mi aburrido matrimonio, consigo ser violada delante de mi marido para obtener el divorcio ansiado.

-Quiero que me violes delante de mi marido, de mis padres, de mi gente –le digo a mi amante al acariciar los rizados vellos de su pecho. -Quiero que los robes, que los hagas rogar por su vida y que, delante de ellos, me desnudez y me metas entera esta verga tan rica –le digo, mientras mi mano acaricia su vergota, pringosa con mis jugos, que descansa después de haberme dado lo mío. -Quiero que rompas su burbuja de cristal, papito –le ruego, mientras me cabalga con furia. Odiaba mi mundo, odiaba a mis...

Sesión fotográfica

De como me convencieron para tomarme fotos de una gran cogida.

¡Me estaban fotografiando! La sensación de saberlo erizaba mi piel tanto –o más- como la ígnea verga que me rompía por detrás. Mi panochita, empapada y sabrosamente adolorida, recibía feliz el furioso embate de mi corruptor, mientras uno de sus achichincles, con notoria erección bajo la ropa, tomaba acercamientos desde todos los ángulos posibles, en tanto el otro –eran dos- nos fotografiaba desde más lejos.

Veinte mil pesos me ofreció el atractivo funcionario cuarentón, veinte mil pesos por una...